Te quiero porque me gusta quererte en todo momento. Cuando estamos juntos y me abrazas, o cuando me das un beso en la frente porque te apetece. Cuando acaricias mi tripa hasta que me quedo dormida en tus brazos. Cuando repasas cada una de las facciones de mi cara y me dices que soy perfecta. Cuando estás cansado y te duermes en mi pecho. Cuando gritamos de madrugada en medio de un parque porque necesitamos desahogarnos. Cuando estoy triste y pones tu mejilla para que me sienta mejor dando un tortazo a alguien, y reírnos a carcajadas después. Cuando diez segundos antes de que empiece a reír me preguntas que por qué me río. Cuando me llamas lleno de alegría para darme una buena noticia. Cuando estás feliz. Porque yo solo quiero verte feliz, sea entre mis brazos, o en el otro lado del mundo. De eso no me preocupo, el destino se encargará de volver a ponernos a 10 centímetros de distancia.
Te quiero porque me inspiras para escribirte estos renglones llenos de alegría, y de amor.
Te quiero porque haces que mi vida sea un sueño.
(María G. Carbajosa)